top of page

Aprobación de nueva píldora genérica para el aborto desata indignación entre conservadores en EE. UU.

ree

Washington, EE. UU. — En un movimiento que ha generado fuerte controversia política y social, la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE. UU. (FDA, por sus siglas en inglés) aprobó el 2 de octubre de 2025 una segunda versión genérica del medicamento mifepristona, una píldora utilizada en combinación con misoprostol para interrumpir embarazos de hasta 10 semanas.

Aunque la aprobación responde a procedimientos regulatorios estándar de equivalencia de genéricos, la decisión provocó reacciones contundentes desde sectores conservadores y grupos antiaborto.

Contexto de la aprobación

  • La nueva versión genérica es producida por la empresa Evita Solutions, que asegura que con ello busca dar acceso a una alternativa más económica.

  • La FDA aclaró que, en el contexto de medicamentos genéricos, su rol se limita a verificar que la fórmula sea idéntica al producto de referencia; no implica un respaldo explícito del producto..

  • Esta aprobación se suma al primer genérico aprobado en 2019 (GenBioPro) que ya ofrecía una alternativa al nombre de marca del medicamento.

  • Evita Solutions anunció que su versión podría estar disponible en el mercado en enero de 2026.

Reacciones desde el ala conservadora

Los críticos de esta medida catalogaron la decisión como una traición a los principios pro-vida y un abuso del poder regulatorio:

  • Organismos como Students for Life Action calificaron la aprobación como “una mancha en la presidencia de Trump” y una señal de que “el estado profundo en la FDA debe irse”.

  • El senador republicano Josh Hawley manifestó en su red social que “ha perdido la confianza en la dirección de la FDA”.

  • El expresidente Mike Pence fue aún más duro, calificando el acto como “una completa traición al movimiento pro-vida” y pidió la renuncia del secretario de salud, Robert F. Kennedy Jr.

  • Anthony Pro‑Life America calificó la aprobación como “irresponsable” e “inconsciente” desde un punto de vista ideológico.

Estas reacciones surgen en un escenario político ya tenso, con legislaciones estatales en varios estados que prohíben el aborto o lo restringen fuertemente, y con demandas judiciales activas sobre los límites del uso de la píldora.


Defensa médica y postura de organizaciones de salud

Frente a las críticas, los defensores del acceso reproductivo y varias organizaciones médicas han respaldado la decisión, señalando:

  • Que mifepristona es un medicamento con décadas de uso seguro, estudiado en múltiples trabajos científicos que respaldan su eficacia.

  • Que restringir el acceso al medicamento podría poner en riesgo la salud pública, obligando a mujeres a recurrir a opciones más inseguras.

  • Que el proceso de aprobación de genéricos, basado en demostrar equivalencia, no es una novedad ni una excepción en la política farmacéutica estadounidense.

Además, algunas coaliciones y estados con administraciones demócratas han prometido defender el acceso a esta píldora frente a intentos legales de revertirla.


ree

Implicaciones políticas y disputas regulatorias

Este episodio llega en un momento delicado:

  • La decisión ocurre en medio de promesas previas de Robert F. Kennedy Jr. de revisar la seguridad de mifepristona, tras presiones de fiscales estatales conservadores.

  • El descontento de sectores conservadores pone tensión dentro del propio electorado republicano, que ve incoherencia entre el discurso “pro-vida” y decisiones institucionales que amplían acceso médico al aborto.

  • Legalmente, aunque la FDA tiene obligación de aprobar genéricos que cumplan con los requisitos federales, el uso del medicamento en cada estado continúa supeditado a las leyes locales y a litigios aún en curso.


Comentarios


bottom of page